Quantcast
Channel: Cienojetes
Viewing all articles
Browse latest Browse all 133

Premio Nacional de Fotografía… de paisaje

$
0
0

Desde Cienojetes, en nuestra comprometida labor de servicio desinteresado para fotógrafos, iniciamos con el post de hoy una nueva línea. Hemos acumulado ya el conocimiento y el arrojo necesarios para empezar a daros consejos de cómo ser auténticos triunfadores, algo más que eternos fotógrafos emergentes. Y hemos querido empezar a lo grande, a lo enorme, a lo bestia. Vamos a daros las claves para ganar el Premio Nacional de Fotografía… de paisaje.

Vosotros diréis que eso es apuntar muy alto, que quizá vuestra trayectoria no sea tan dilatada y exitosa como para poder optar a tamaño galardón. Os debo aclarar entonces que aunque el nombre asuste a primera vista la cosa igual no es para tanto. Los organizadores han debido pensar que si van a dar un premio, la cosa versa sobre la fotografía de paisaje y puede participar cualquier persona a nivel nacional, entonces el nombre está claro: Premio Nacional de Fotografía… de paisaje. ¡Estos tíos sí que saben, vaya genios! Es verdad, se le podría haber llamado “Certamen”, “Concurso” o “Torneo a muerte”, pero habrán pensado que ningún candidato podría resistirse a inscribir  su nombre casi casi a la misma altura que el de ilustres fotógrafos como José Manuel Ballester o Bleda y Rosa (por citar a los menos controvertidos).

Aclarado el tema del nombre, vamos a analizar algunos aspectos de las bases del concurso con el fin de poder daros algunos consejos en pro de vuestra misión triunfal. Dice el punto 2 que “no se admitirán fotos que por su temática puedan herir cualquier tipo de sensibilidad o sean ofensivas”. Si os cuesta leer entre líneas aquí hay un mensaje clarísimo, evidente a los ojos de un digno aspirante al galardón: prohibido el HDR. Son ya múltiples los casos conocidos de personas que han quedado ciegas o gravemente traumatizadas al contemplar fotos HDR. Si no me creéis os voy a poner un ejemplo, pero en Cienojetes no queremos saber luego nada de posibles daños y perjuicios. Ahí va.

¡Mis ojos!¡Mis ojooos!

¡Mis ojos!¡Mis ojooos!

Continuemos con un aspecto que no es menor en este caso: la cuota de inscripción en función del número de fotos que vayáis a presentar. De 1 a 5 fotos: 15€; entre 6 y 10: 25€. El que haya jugado a la lotería lo ha pillado a la primera. Sí, amigos. Efectivamente. Los que no vayáis sobrados de pasta tendréis que tomar la difícil decisión de si pongo la línea del horizonte en el primer tercio de la imagen o en el segundo tercio. Los que vayáis más desahogados podéis mandar la dos versiones: una donde aparezca en mayor proporción un cielo bíblico como Dios manda y otra donde predomine esa tierra de texturas increíbles.

Qué hacer con el horizonte…

Un tercer aspecto que destaca al examinar las bases de la convocatoria es el premio. ¡Qué digo premio! ¡Es un locurón, se han liado la manta a la cabeza! Te llevas 1000€ para tus cosas (yo os sugiero el viaje a Islandia si es que todavía lo tenéis pendiente), 1000€ para impresiones de fotos y 1000€ en cursos de formación. Desde aquí quiero hacer un llamamiento a la gente del Ministerio de Cultura para que tomen nota de esto último y lo incorporen también al “Premio Nacional de Fotografía… de verdad”. Nuestros ilustres premiados también necesitan de vez en cuando un reciclaje, alguien tiene que decirle a la pobre Ouka Leele de una vez que las fotos las puede pintar ya con el Photoshop, que mira que tenéis mala uva ocultándole las posibilidades de tan magnífica herramienta.

Estamos en una coyuntura económica en la que no podemos despreciar la cuantía del premio. 1000 euracos para tus cosas es mucha tela. Así que desde ya os recomendamos que no os andéis con tonterías e innovaciones necesarias. Id a lo seguro. Mandad fotos como esas que estáis hartos de ver en primera página del Flickr o que tienen chorrocientos “Me gusta” en el Facebook. Es cierto que hay fotografías de paisaje que no siguen las modas actuales y que están muy cotizadas. Una foto de Edward Steichen (The pond, moonlight) se subastó por 2.9 millones de dólares en 2006. Pero Steichen llevaba ya 33 años muerto y a vosotros la pasta os hace falta ahora. Repito: id a lo seguro.

$2.9M (33 años después de haber muerto)

1000€ de dinero directo a tu bolsillo

Una vez que hemos analizado las bases no vamos a seguir el enfoque clásico de lo que debéis hacer, porque para eso tenéis libros buenísimos de gente muy humilde y modesta que podéis comprar en cualquier librería de barrio. Os vamos dejar claro lo que NO debéis hacer, por mucho que haya cuatro modernos por ahí que tengan cierto éxito de con este tipo de imágenes. Vamos a empezar analizando una foto de Hiroshi Sugimoto que nos viene al pelo. Cierto es que U2 utilizó una imagen de este buen hombre como portada de uno de sus discos insufribles, pero vosotros no andáis buscando eso. Vuestro verdadero objetivo es, y siempre será, que vuestras imágenes acaben como fondo de escritorio en miles de ordenadores, un universo idílico para el icono de la papelera de reciclaje. Veamos en qué pincha Sugimoto:

Hiroshi Sugimoto (o el efecto vaho)

Aquí no hay ni punto, ni línea, ni textura, ni forma, ni color ni nada de nada. El horizonte está en todo el medio, en una ofensa intolerable a la regla de los tercios o a la proporción áurea. Además no ha tenido la habilidad de encontrar una buena roca en un primer plano que le proporcione profundidad a la foto. O qué decir de ese medio camino entre un maravilloso efecto seda del agua o unas tremendas gotas de espuma. Aunque quizá lo más intolerable de todo es que no hay ni amanecer ni atardecer y se ha ido a tirar la foto sin hacer todos los cálculos astronómicos necesarios para estudiar las mareas. Mirad lo que os digo, yo hasta dudo que eso sea el mar, creo que es una foto de un vaso de agua tras haberle echado un poco de vaho al objetivo de la cámara.

El último consejo que tengo que daros tiene relación con una regla no escrita de la fotografía de paisaje de altísima calidad: el angular hay que ponerlo a todo lo que dé. Os van a tirar para atrás todas las fotos que no estén hechas, como mínimo, con un 10mm. La mejor foto de paisaje es la que lo capta todo, hay que meter cuantas más cosas mejor dentro de la fotografía. Yo cada vez que veo una foto de Franco Fontana acabo preguntándome si este hombre hacía fotos de paisaje o los miraba con prismáticos. ¡Válgame! ¡Qué claustrofobia!

Franco Fontana (a través de sus prismáticos)

Esperamos que nuestras indicaciones os ayuden a conseguir lo que se espera exactamente de vosotros: producir fotografías completamente indistinguibles de las de los otros participantes. ¡Suerte amigos!



Viewing all articles
Browse latest Browse all 133

Trending Articles